Ahorrar en los costes energéticos de una empresa, sin disminuir su productividad y reduciendo además su impacto en el entorno natural no solo es posible, sino que se ha convertido en algo prácticamente imprescindible.
Por eso, te comentamos a continuación 6 claves para conseguir un ahorro energético en las empresas que permiten maximizar la eficiencia en todos sus procesos y áreas de trabajo de forma sostenible y completamente respetuosa con el medioambiente.
Índice
¿Por qué reducir el consumo energético?
Disminuir el consumo energético en las empresas es fundamental, entre otras, por las siguientes razones:
- Contribuye a disminuir la huella de carbono y el impacto ambiental que generan las actividades empresariales, lo que es determinante a la hora de cuidar el medio ambiente y promover la sostenibilidad.
- Permite obtener importantes ahorros económicos en las facturas energéticas, lo que se traduce en una mayor rentabilidad para la empresa. No hay que olvidar que una de las razones de ser de cualquier negocio es la obtención de beneficios económicos.
- Mejora la productividad y el bienestar de los trabajadores, lo que genera un ambiente más confortable y saludable en el entorno laboral.
Por todo lo anterior, resulta esencial que las empresas reduzcan su consumo energético y promuevan prácticas más sostenibles y responsables. Un compromiso que, por suerte, muchas compañías han decidido asumir tanto en España como en el resto del mundo.
6 claves para conseguir un ahorro energético en las empresas
Reducir el consumo energético debe ser una prioridad para cualquier empresa comprometida con la sostenibilidad y la rentabilidad. A priori, puede parecer un objetivo ambicioso, pero lo bien cierto es que existen determinadas claves que pueden ayudar a conseguir un ahorro energético significativo, sin afectar la productividad o competitividad de las empresas, que conviene conocer y aplicar. A saber:
- Realizar una auditoría energética: la primera de las claves para conseguir un ahorro energético en las empresas es realizar una auditoría que permita conocer el consumo real de energía de la empresa e identificar los puntos críticos y las oportunidades de mejora. Dicha auditoría puede ser realizada por personal interno especialista en la materia o por una empresa especializada en eficiencia energética como Axpo.
- Implementar medidas de eficiencia energética: una vez sepamos dónde se malgasta energía y cómo mejorar la situación, es importante implementar las medidas de eficiencia energética más apropiadas en cada caso. Lo que puede traducirse en instalación de equipos más eficientes, optimización de ciertos procesos o eliminación de consumos que resulten innecesarios.
- Usar la energía de forma responsable: además de implementar medidas de eficiencia energética, es fundamental promover el uso responsable de la energía entre los empleados y colaboradores de la empresa. Es primordial formar a los trabajadores sobre la importancia del ahorro energético y fomentar el uso de tecnologías más eficientes mediante políticas que incentiven el ahorro energético.
- Evaluar la iluminación de los espacios: la iluminación es una de las partidas con mayor consumo de energía en cualquier empresa. De ahí que optar por tecnologías más eficientes, como las bombillas LED, pueda ser una gran oportunidad para conseguir una iluminación sostenible y un ahorro energético significativo. Otra forma de reducir el consumo de energía en iluminación es aprovechar al máximo la luz natural, para lo que resulta fundamental diseñar los espacios de trabajo de forma que permitan el ingreso de la luz del sol.
- Controlar el uso de equipos de oficina: los equipos de oficina, como las impresoras, las fotocopiadoras o los ordenadores, pueden consumir grandes cantidades de energía si no se utilizan de forma adecuada. Es importante establecer políticas de uso responsable de estos equipos, como apagarlos cuando no se estén utilizando, y optar por tecnologías más eficientes, como los ordenadores de bajo consumo.
- Mejorar la gestión de la climatización: la climatización es otra de las áreas que más energía consumen en una empresa. Por eso, es importante evaluar y optimizar los sistemas de climatización y fomentar un empleo responsable entre los trabajadores para evitar un uso excesivo de la calefacción o el aire acondicionado y controlar su consumo.
Conseguir un ahorro energético en las empresas reduce los costes económicos y tiene un impacto positivo en el medio ambiente, un objetivo necesario para contribuir a un futuro más sostenible.
