La energía solar fotovoltaica es una fuente de energía limpia y sostenible que ha ido ganando protagonismo en el panorama energético mundial en las últimas décadas. Esta forma de aprovechar la luz solar para generar electricidad ha revolucionado la industria energética y ha contribuido significativamente a la reducción de las emisiones de CO2. A continuación, exploraremos qué es la energía solar fotovoltaica y cómo funciona esta tecnología.
¿Qué es la energía solar fotovoltaica?
La energía solar fotovoltaica es una forma de generación de electricidad que utiliza placas solares para convertir la radiación solar en energía eléctrica.
Esta energía es renovable, al ser la luz del Sol una fuente de energía inagotable, limpia, pues no emite gases de efecto invernadero ni contaminantes atmosféricos, y económica, ya que los avances tecnológicos han abaratado considerablemente los paneles solares. Además, es silenciosa, por lo que no provoca contaminación acústica, y contribuye al desarrollo económico generando puestos de trabajo.
¿Cómo funciona la energía solar fotovoltaica?
En el interior del sol, las altas presiones y temperaturas dan origen a fenómenos de fusión nuclear. Un proceso en el que varios átomos de hidrógeno se unen originando un átomo de helio, lo que libera enormes cantidades de energía que llegan hasta nuestro planeta.
Para que toda esa energía solar se transforme en energía eléctrica es necesario que interactúe con las placas solares. Estas placas están compuestas por células fotovoltaicas fabricadas con dos capas de silicio con cargas positiva y negativa, respectivamente. Cuando los fotones de la luz solar impactan sobre las células fotovoltaicas liberan electrones que interactúan entre sí generando corriente eléctrica.
Un aspecto interesante de la energía solar fotovoltaica es que puede ser utilizada tanto en sistemas conectados a la red eléctrica pública como en sistemas autónomos.
- Los sistemas conectados a la red permiten a los propietarios inyectar el exceso de energía a la red y obtener una compensación.
- Los sistemas autónomos son ideales para ubicaciones remotas donde no hay acceso a la red eléctrica.
A medida que la demanda de energía renovable sigue creciendo, la energía solar fotovoltaica desempeñará un papel fundamental en la transición hacia un futuro más sostenible.