No todas las empresas necesitan la misma potencia eléctrica para realizar sus tareas, ya que la demanda energética varía en función del tipo de actividad y equipamiento. Si estás preguntándote si es mejor para tu negocio una instalación monofásica o trifásica, aquí repasamos todos los aspectos de cada una de ellas para que puedas tomar la mejor decisión al respecto.
Diferencias entre una instalación monofásica y trifásica
A la hora de elegir entre una u otra es importante conocer las características que las diferencian:
- Las instalaciones monofásicas, como su propio nombre indica, solo tienen una fase y una corriente alterna, es decir, suministran la electricidad por una única vía. Por su parte, las trifásicas utilizan tres fases y tres corrientes alternas diferentes y, por lo tanto, distribuyen la electricidad a través de tres canales principales.
- Las instalaciones de una sola fase utilizan, al menos, dos cables, uno que trae la electricidad (fase) y otro que la devuelve (neutro). Sin embargo, las de tres fases usan cuatro cables eléctricos, a saber: el neutro y uno para cada una de las fases.
- Las monofásicas ofrecen una tensión de 220 o 230 voltios, por lo que pueden soportar hasta 13,86 kW, en el primer caso, y hasta 14,49 kW, en el segundo. En cuanto a las trifásicas, estas manejan una tensión de 380 o 400 voltios y, como mínimo y por ley, tendrán una potencia contratada de 15 kW.
- El cableado monofásico es el que encontraremos en casas, apartamentos y pequeños negocios, donde el volumen de dispositivos eléctricos y electrodomésticos ronda los 7, mientras que el trifásico es el propio de naves industriales y edificios comerciales, donde suele haber más de 10 aparatos o máquinas funcionando al mismo tiempo.
Ventajas y desventajas de cada instalación
La mejor forma de decidir entre instalaciones monofásicas o trifásicas es analizar con detenimiento sus pros y contras y ponerlos en relación con las necesidades de tu empresa. Solo así te asegurarás de estar tomando la decisión adecuada.
Las instalaciones monofásicas tienen a su favor que la instalación inicial y el mantenimiento sean más baratos, la factura más económica y las reparaciones más sencillas debido a su menor complejidad. En el lado menos bueno hay que decir que no pueden soportar cargas superiores a 14,49 kW y, por tanto, no son la opción más adecuada cuando se cuenta con dispositivos de alto consumo.
Por el contrario, la ventaja principal de las trifásicas es que pueden transmitir más potencia eléctrica que las monofásicas, y ello con menores pérdidas y riesgos de sobrecarga. Lo que se traduce en menores costes operativos y un uso más eficiente de la energía. En cuanto a sus inconvenientes, hay que decir que los costes de instalación y mantenimiento son más elevados por cuanto requieren de más cableado y componentes.
Nuestro consejo es que calcules el consumo eléctrico de tu empresa, valorando seriamente las posibilidades de un crecimiento a medio plazo. Una vez hagas números, decídete por la monofásica si tu empresa va a necesitar una potencia igual o inferior a 10 kW o por la trifásica si vas a requerir más de 10 kW.
Cómo saber si tu instalación es monofásica o trifásica
Para identificar la instalación eléctrica de tu empresa debes revisar el cuadro eléctrico. En concreto, los interruptores principales: el Automático (IGA), el Diferencial (ID) y el de Control de Potencia (ICP). Si dichos dispositivos son dobles estás ante una instalación monofásica, si son triples la tuya es una instalación trifásica. Así de sencillo.
¿Se puede cambiar?
Sí, es posible cambiar una instalación monofásica a trifásica, y viceversa. Para realizar el cambio, deberás ponerte en contacto con tu comercializadora, que a su vez lo notificará a la distribuidora. Posteriormente, un instalador electricista autorizado realizará el cambio de contador, cuadro eléctrico y cableado, emitiendo al finalizar el preceptivo Certificado de la Instalación Eléctrica.
Esperamos que, después de leer este post, el mundo de la monofásica y trifásica ya no tenga secretos para ti. En caso contrario, llámanos.
