Dar de baja la luz de un negocio puede parecer un proceso complicado y tortuoso, pero en AXPO Iberia resulta muy sencillo. Queremos únicamente clientes contentos y satisfechos con nuestro servicio suizo de energía eléctrica, pero si no es tu caso no vamos a ponerte trabas para que te quedes. Por eso hemos elaborado una sencilla guía para que sepas qué pasos seguir si buscas cómo dar de baja la luz con nosotros.

Si quieres dar de baja tu suministro de energía eléctrica, solo tienes que ponerte en contacto con nosotros en el email clientes.es@axpo.com o en el teléfono 900 10 13 11, totalmente gratuito para ti. Además, recuerda que para evitar cualquier tipo de penalización debes solicitar la baja al menos 30 días antes de la finalización de tu contrato.

¿Qué implica dar de baja la luz?

Decidir dar de baja la luz de un negocio no es una decisión cualquiera, ya que, para empezar, implica quedarse sin suministro de energía eléctrica por completo. Es decir, en este caso no hablamos de un cambio de compañía que no afectará para nada al funcionamiento de una empresa, que simplemente cambiará de suministrados sin ver alterada su producción. Hablamos de un cese total del suministro, por lo que conviene valorar esta situación con la gravedad con la que se debe.

Y es que dar de baja la luz supone, para empezar, la retirada del contador y, por tanto, el cese total del contrato. Esto implica que, de querer reactivarlo, o iniciar un nuevo contrato con otra comercializadora, habrá que hacer frente a los costes de dar de alta la luz de nuevo, como el primer día.

¿Cuándo puede producirse la baja involuntaria por parte de la compañía?

El proceso de dar de baja la luz es tan definitivo que únicamente existe una situación en la que AXPO Iberia puede gestionar una baja involuntaria por parte del usuario profesional: el impago de las facturas por parte de este.

Llegado este caso, la compañía energética lanzará un comunicado al cliente exigiendo el pago de las posibles deudas y marcando un plazo de tiempo dentro del que poder hacerlo sin problema. En caso de no satisfacer dicha cantidad en tiempo y forma, la compañía procederá a la retirada del contador de la luz de la empresa deudora.

Esto significa no solo el corte de la energía eléctrica, sino que, de querer reactivar el servicio, la empresa en cuestión deberá hacer frente a una nueva instalación con los costes que ello conlleva.

Todo esto hace que no sea nada recomendable arrastrar deudas con la suministradora de energía eléctrica para la actividad económica, ya que los costes a medio/largo plazo pueden ser aún mayores si cabe.

¿Cuándo debo dar de baja el contrato de luz y gas?

Existen diferentes motivos que pueden llevarte a plantear la posibilidad de dar de baja la luz de un negocio, pero no todos ellos resultan igual de acertados. Por ejemplo, estar descontento con un servicio determinado no justifica una baja, sino más bien un cambio de compañía eléctrica. En el caso de un traspaso de negocio, es preferible gestionar un cambio de titularidad, ya que facilitará la puesta en marcha del nuevo propietario y también disminuirá los costes, así como los tiempos de inicio de la nueva actividad.

En caso de negocio o local alquilado

Si el local en el que se ubica una empresa es alquilado, no hay traspaso de por medio y el dueño no tiene intención de hacerse cargo de los gastos de luz hasta la llegada de un nuevo arrendatario, la mejor solución es dar de baja la luz, ya que de cualquier otro modo el titular se verá obligado a hacer frente a los costes.

Distinto es el caso de que el dueño quisiese hacerse cargo para facilitar otro posible alquiler, o que otro empresario quiera emprender una actividad laboral de inmediato en el mismo local y solicite un cambio de titularidad del contrato de suministro de energía eléctrica.

En caso de compraventa

Si nos encontramos ante un caso de compraventa de local, lo más habitual es dar de baja la luz y que el nuevo propietario inicie los trámites de alta desde cero.

En caso de negocio estacional

Existen determinados tipos de negocios, como ciertos restaurantes o heladerías, por poner un ejemplo, que únicamente operan durante un número muy determinado de meses, generalmente por encontrarse en lugares de gran afluencia de público en periodos vacacionales, pero no poder hacer frente a los gastos el resto del año.

En este caso, lo mejor es evaluar cuánto costaría dar de baja la luz y tener que dar de alta un nuevo contrato después, así como tener en cuenta los plazos de tiempo necesarios para reactivar el servicio a tiempo de poder reanudar el servicio estacional a tiempo.