La sostenibilidad empresarial o corporativa busca el equilibrio entre el beneficio económico, el bienestar social y la protección medioambiental. Las empresas que la practican han decidido paliar el impacto provocado por su actividad adoptando prácticas que, siendo rentables, son ambiental y socialmente responsables. En Axpo te contamos qué es la sostenibilidad empresarial y en qué pilares se basa.
¿Qué es la sostenibilidad empresarial?
La sostenibilidad empresarial es la implementación de un modelo de negocio que promueve el crecimiento económico con el mayor bienestar en la comunidad y el menor impacto posible en el medioambiente.
En palabras de la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de la ONU, el desarrollo sostenible pretende satisfacer “las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades”.
Además de los beneficios mencionados, la sostenibilidad corporativa incrementa la reputación de marca (la percepción que los consumidores tienen de tu empresa), retiene talento (la filosofía de tu negocio puede ser un incentivo para mantener a tu lado a los trabajadores más cualificados) y reduce los costes (a mayor eficiencia, menos costes derivados del propio funcionamiento de la empresa).
Los 3 pilares de la sostenibilidad empresarial
Como hemos indicado, la sostenibilidad empresarial es una estrategia integral que se centra en tres áreas de trabajo: ambiental, social y económica.
Sostenibilidad ambiental
Las empresas generan un impacto en el entorno y en el medio ambiente, así que para desarrollarse sosteniblemente deben utilizar energías renovables, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y optimizar los recursos naturales.
Asimismo, pocas actuaciones minimizan tanto el impacto medioambiental de las actividades empresariales como fomentar la reutilización, eliminar los residuos, apostar por la economía circular y participar en todo tipo de acciones que contribuyan a proteger el planeta.
Sostenibilidad social
Desde el punto de vista social, la sostenibilidad corporativa pretende tener un impacto positivo en la sociedad en su conjunto y, más concretamente, en las personas con quienes la empresa se relaciona de forma directa: empleados, proveedores, consumidores…
Es por tanto fundamental que las empresas adopten prácticas responsables en cuanto a derechos humanos, igualdad, equidad e inclusión.
Entre otras: flexibilidad de horarios, formaciones para la plantilla, conciliación laboral, adopción de medidas para la igualdad de género y la diversidad entre los trabajadores…
Sostenibilidad económica
Por supuesto, una empresa no puede perder de vista sus objetivos económicos. De lo contrario, dejará de ser rentable y difícilmente podrá tener un impacto positivo en su entorno.
Las empresas tienen que adoptar prácticas que, siendo respetuosas con el medioambiente y la sociedad, les permitan un desarrollo económico a largo plazo.
La sostenibilidad económica pasa por la generación de empleo, el control del endeudamiento, la capacidad de generar beneficios y la realización de inversiones que generen ingresos a medio y largo plazo.
Beneficios del crecimiento sostenible empresarial
El crecimiento sostenible de una empresa aporta numerosas ventajas tanto a nivel interno como externo; lo que, como hemos comentado, mejora la percepción de la compañía por parte de los consumidores y aumenta su competitividad en el mercado.
Estos son algunos de los principales beneficios de los que disfrutará tu negocio si te pones manos a la obra:
- Mayor adaptabilidad a los cambios y tendencias emergentes, lo que aumentará la competitividad de tu empresa.
- Mayor atractivo para los trabajadores con talento, que valoran los lugares de trabajo éticos y responsables.
- Mayor reducción en el consumo de recursos, lo que minimizará el impacto de tu actividad económica en el medio ambiente creando un ciclo de producción más sostenible.
- Mayor innovación empresarial, lo que te permitirá desarrollar productos y servicios que abran nuevos nichos de mercado.
- Mayor confianza y credibilidad, lo que fidelizará a tus clientes y favorecerá la llegada de inversores.
Cómo definir una estrategia de sostenibilidad empresarial
Cuando se busca la sostenibilidad corporativa es necesario enfocar las medidas hacia ese equilibrio entre sostenibilidad social, medioambiental y económica. Para eso, es imprescindible elaborar una estrategia de sostenibilidad, una hoja de ruta que permita avanzar de manera ordenada. ¿Quieres saber cómo? Apunta.
- Realiza un diagnóstico inicial. Identifica los riesgos existentes y las oportunidades de mejora. Tener claro el punto de partida te ayudará a minimizar los primeros y a aprovechar las segundas.
- Establece unos objetivos específicos. Las metas deben ser realistas, medibles y acotadas en el tiempo. Además, deben estar alineadas con los temas de sostenibilidad que sean más relevantes para tu empresa.
- Define los indicadores de sostenibilidad. Para poder medir y evaluar el impacto de tu estrategia debes establecer diferentes indicadores en cada uno de los pilares fundamentales: ambiental, social y económico. Por ejemplo, calcula tu huella de carbono, cuantifica la cantidad de residuos que produces, calcula la cantidad de agua que consumes…
- Difunde tu estrategia. Comunica tu plan de sostenibilidad a todas las partes implicadas en las prácticas responsables que adopte tu empresa: empleados, clientes, proveedores, socios, etc. Crea una cultura de sostenibilidad corporativa.
- Implementa tu plan de sostenibilidad. Define los responsables de cada acción y los plazos para su realización. Si hay auténtico compromiso, no tardarás en ver los primeros resultados.
- Haz un seguimiento de tu estrategia. Otro de los parámetros a definir es la periodicidad con la que revisarás tu estrategia y comprobarás la evolución en el cumplimiento de tus objetivos. Realizar un informe, tras cada reunión de seguimiento, te permitirá hacer una trazabilidad de tu estrategia de sostenibilidad.
- Mejora la transparencia. Rendir cuentas sobre tus políticas de sostenibilidad empresarial aumentará el compromiso entre tus empleados y la confianza de la sociedad en tu negocio.
Siguiendo estos pasos, podrás implementar con éxito una política equilibrada de sostenibilidad empresarial, esencial para el crecimiento de tu negocio a medio y largo plazo. Podrás lograr tus objetivos económicos a la vez que reduces el impacto negativo de tu actividad empresarial en la sociedad y en el medio ambiente. Una empresa no sostenible, que no apuesta, por ejemplo, por la energía solar, no tiene futuro. ¿Estás preparado para dar el paso?